sábado, 4 de julio de 2009

Sobre las sectas, en recuerdo de Pilar SALARRULLANA

sábado 4 de julio de 2009

Pilar Salarrullana de Verda, fue una experta en sectas que falleció de cáncer el pasado 27 de junio con 72 años, había sido diputada y senadora por La Rioja en los años 80. Os traigo esta interesante entrevista publicada por la Red Iberoamericana de Estudio de las Sectas.
Conversando con Pilar Salarrullana de Verda, política, escritora y profesora española, conocida por sus libros e investigaciones en torno a las sectas. Fue senadora y diputada por La Rioja en los años 80 y concejal de la ciudad de Logroño. Así se encabezaba hace unos años una entrevista con la experta, que está publicada en el portal católico Encuentra.com y que reproducimos a continuación.
- Pilar, vamos a ver si en este breve espacio que tenemos de tiempo nos informas bien: Primero, ¿qué diferencia hay entre una secta y una religión?
- La diferencia es total. Pero para ver esta diferencia tenemos que poner a la palabra secta un apellido. Porque decir secta sólo es decir separación. El apellido se lo puso el Parlamento Europeo, y ha sido aceptada por el Parlamento español. El apellido es «destructiva». Por eso, toda organización ideológica que eleve al hombre, lo haga más digno como ser humano, no es una secta destructiva. Llamamos sectas destructivas a las que destruyen la capacidad humana de la persona.
- Y, ¿qué métodos utilizan para captar a la gente?
- Los métodos son variadísimos. Generalmente lo hacen a través de mensajes muy sutiles, ofreciendo a la sociedad lo que en ese momento está necesitando. Es una clara utilización de la ley de la oferta y la demanda. En estos momentos en España están utilizando tres mensajes para atraer a la gente. El primero es contra la soledad. Ellos ofrecen un grupo acogedor a personas que están en crisis de soledad, de amor. El segundo mensaje responde al afán de novedad. Hoy está de moda todo lo mágico. Ellos utilizan toda una parafernalia de medios esotéricos.
Y el tercer mensaje es una respuesta a la pérdida de valores. Hoy se han abandonado muchos valores tradicionales que no han sido sustituidos por otros. Ellos ofrecen la perfección del ser humano: dominio de la mente y el cuerpo, dominio de la muerte. Casi todas creen en la reencarnación y ofrecen la llegada de un mundo feliz. Con estos mensajes atraen a la gente.
- ¿Y por qué decimos que son destructivas?
- Porque a partir del momento en que el hombre acepta esos mensajes, le empiezan a despersonalizar utilizando técnicas que son tan viejas como el mundo, pero que cada vez son más sofisticadas para engañar y manipular. Incluso que pueden causar lesiones psíquicas. Lesiones psíquicas, lesiones físicas y consecuencias sociales. Después del período de internado al que someten a la persona que ha entrado en la secta, la persona que sale de allí no tiene nada que ver con la persona que entró. Le obligan a separarse de su entorno: de su familia, de su trabajo, de sus estudios, de sus amigos, de su amor, de todo.
Incluso consecuencias físicas. Hay sectas de tipo orientalista que a los chicos los dejan impotentes, y a las chicas sin menstruación. Sólo quedan con capacidad sexual aquellos que decide el líder. Los demás no. Por eso en esas sectas el problema de la sexualidad es terrible. Otra de las características sectarias es cambiar el vocabulario habitual por el vocabulario, por la jerga, de la secta. Yo conozco dos mil palabras que para nosotros no tienen ningún significado.
Otra característica es la pérdida del sentido del humor. Una de las cosas que distinguen al hombre de los animales y de la robótica es la broma. Ni un animal ni un robot entienden la broma. El sectario, tampoco. Pero lo peor son las lesiones psíquicas. Son las más difíciles de recuperar. Son personas que sufren alucinaciones nocturnas enormes.
- Podemos decir que dejan a los hombres hechos unas piltrafas.
- Los dejan con una enfermedad que ya está catalogada en muchas Academias de Psiquiatría del mundo con el nombre de «síndrome disociativo atípico».
- En tu libro leí que incluso vacían las cuentas corrientes de sus adeptos.
- Eso es en todas. Su finalidad es el dinero. No tienen otra. Toda esa maravillosa capa con la que se presentan a la sociedad no es más que la gran trampa en la que nos quieren hacer caer a todos. Nos dicen: «Vivimos en un país en el que hay libertad religiosa, por lo tanto, no se metan con nosotros». Hay que decirles: «No nos metemos con lo que creen. Pueden creer lo que quieran. Nos metemos con lo que hacen, y las consecuencias de lo que hacen».
Estos señores han montado un impresionante negocio en todos los sentidos. Su fin es el dinero, y todos los medios son válidos. Primero, despersonalizando al adepto. El adepto tiene un compromiso económico y laboral con la secta absoluto y total. Por ejemplo, los miembros de la Cienciología firman con la secta un contrato por dos billones de años. Esto es absurdo, pero se comprometen a trabajar con ellos no sólo en esta vida, sino también en otras vidas futuras, pues creen en la reencarnación. Y para sacar dinero todo es vendible. Las más destructivas utilizan para sacar dinero la venta de niños, de drogas, de armas, la prostitución y el chantaje.
- Me parece que leí algo en tus libros de una secta que hizo falsificar al adepto la firma de sus padres y les vació la cuenta corriente. Arruinó a sus padres para enriquecer a la secta.
- Sí, porque para ellos es esencial llevar dinero a la secta. Si no, no van a ir progresando en la pirámide de la secta. Por eso pasan por encima de sus padres y de todo. Hay una frase que aprenden enseguida los sectarios para su familia: «A vosotros no os he elegido; en cambio a éstos, sí. Ahora éstos son mi familia». En la mayoría de las sectas al líder le llaman «padre», y a la mujer del líder «madre». Y si el líder es una mujer, a ella le llaman «padre», y a su marido «madre».
- Oye, esta proliferación de sectas que tenemos en España, ¿no se puede deber a una pérdida de los valores de la religión católica, que ha hecho a estas víctimas vulnerables al proselitismo de las sectas?
- Ésta es una de las causas. También ha influido la transición política. Se potenciaron las libertades públicas y muchos españoles lo llevaron también al terreno religioso. Y también se debió a que muchos sacerdotes de la Iglesia católica se dejaron comer el terreno, y no han sabido ofrecer su mensaje con el atractivo suficiente.
- ¿Qué se le puede decir a una familia que ha tenido la desgracia de que un hijo suyo haya sido captado por una de estas sectas? ¿Qué podría hacer una familia cristiana para recuperar su ser querido?
- Bueno, el problema es tremendo. Porque la familia no está preparada para esto. Yo he hablado con muchísimos padres, madres, maridos, mujeres a los que se les ha ido un familiar a una secta, y ellos reconocen que no están preparados para esto. Están preparados incluso para que muera un hijo en un accidente de moto. Pero no para que se lo lleve un líder carismático.
Mi consejo a las familias, si el captado es menor de edad, inmediatamente, denunciarlo a la policía y al juzgado. Porque los menores de edad están todavía bajo la tutela de los padres, y no hay poder sectario que se los pueda llevar sin permiso de los padres. Y eso hay que hacerlo, inmediatamente, porque las sectas, como saben que pueden perderlos, los sacan al extranjero con un permiso falsificado del padre.
Si el captado es mayor de edad, el problema es muchísimo mayor; porque legalmente es una persona autosuficiente, con todos sus derechos. Si él dice: «yo estoy aquí porque quiero», ¿quién los puede sacar de allí? Mi consejo entonces es de doble vía.
Una, de actuación con el adepto. Pero no decirle lo que uno está deseando: «Estás loco. Te has dejado engañar por estos chiflados. No te creas nada de lo que te dicen, etc.». No. Hay que hacer todo lo contrario. No hay que darle excusa para que diga que no le comprenden. Hay que darle lo que le dan las sectas: comprensión y cariño. Aunque cueste mucho. Porque es muy difícil. Y después no darles ni un duro. Aunque pidan para unos estudios o un viaje. No darles ni un duro. Si ya está dentro de la secta, hay que ponerlo en manos de expertos. Si hay pruebas de malos tratos, de mala alimentación, pérdida de peso, etc., entonces denunciarlo a la policía y al juzgado. Y si sale a la calle, preparar un equipo de recuperadores y recuperarlo. Pero no es nada fácil.
- Pobre gente. Es horrible. Es un drama. Tú tendrás casos horribles.
- Es doloroso. Ahora que no soy diputada, quiero dejar lo de las sectas, pero no puedo. Porque si me llama una persona llorando a lágrima viva, o me viene contándome un drama espantoso, yo le tengo que ayudar. Hay una asociación de padres afectados por sectas que se unieron hace ya diez años. Empezaron en Barcelona. Se llama Asociación Pro-Juventud. Hoy tiene delegaciones en Bilbao, Valencia, León, Málaga y Madrid. Se dedican a ayudar a familias que tienen estos problemas. Además tienen tras ellos un equipo de recuperación que se llama PROAS. Son profesionales, expertos. Porque si el que lo recupera es un inexperto, aficionado, puede hacerle doble daño. Hay que asegurarse quién hace la recuperación.
- Ahora mismo en España los que meten más ruido y son más proselitistas son los Testigos de Jehová. ¿Qué me dices de ellos?
- Los Testigos de Jehová son una secta que se escindió de los Adventistas del Séptimo Día, en Estados Unidos. Su fundador, Russell, montó un negocio editorial a base de vender libros. Esta secta es difícil combatirla en España, porque está reconocida como Iglesia, y registrada en el Ministerio de Justicia. Pero es muy fácil catalogarla como secta destructiva. Por supuesto que no la he catalogado yo. Está catalogada así en todos los catálogos de expertos del mundo. Y así está declarada por la Organización Mundial de la Salud por ir en contra de la caridad al negar las transfusiones de sangre a sus adeptos. Pero quiero decir que los Testigos de Jehová de a pie son gente estupenda, que creen lo que predican. El mal está en los de arriba, que son los que se están aprovechando de su credibilidad y de su sentimiento de culpabilidad por las continuas amenazas.
- ¿Cómo? ¿Que están amenazados para que hagan proselitismo?
- Para todo. Ellos están continuamente en una petición de revisión de sus culpas. Están cogidos por el temor. Quizás por eso parecen fanáticos. Cuando hablas con ellos, no te dejan hablar. Si les refutas lo que dicen, saltan a otra cosa. Nunca te dan la razón, aunque sea evidente que la tienes. Si se ven acorralados, saltan a otra cosa. Parecen fanáticos. Como si les hubieran comido el coco. Parecen un robot.
Esa es la descripción auténtica del sectario. Es la robotización: todos iguales y todos diciendo lo mismo. Durante el período de adoctrinamiento les meten lo que las mismas sectas llaman el cliché. Son respuestas muy simples a preguntas muy simples. Cuando no tienen respuesta a la pregunta que le hacen, saltan a otra cosa.
Como decías antes, estas personas, individualmente, parecen buenas. Pero a mí me hace el efecto que son gente ignorante. Me refiero a los Testigos de Jehová. Prescindo de otras sectas que van a otros niveles. Pero los Testigos de Jehová que te encuentras, parece que son personas muy ignorantes. Sabían muy poca religión católica, y por eso ha sido muy fácil engañarles. Me da la impresión de que los Testigos de Jehová buscan gente ignorante.
- En una ocasión oí esta frase: «Católico ignorante, seguro protestante».
- Está totalmente en lo cierto. Se dirigen a un nivel económico y cultural bajo. De poca preparación. Otras no. Por ejemplo la Cienciología, que es la que más conozco. Me ha amenazado de muerte. Me ha declarado persona a destruir. He tenido que estar con escolta policial durante tres años. Esta es una secta sincrética. Hacen una amalgama de todas las religiones existentes. Las mezclan como en una coctelera y sacan una nueva teoría. Tienen técnicas de control mental. Saben muy bien a quién se dirigen, y en qué momento. Y tienen mucho éxito. Además sacan el dinero a montones. Someten a sus adeptos a unas sesiones en las que se depuran de sus vivencias personales: no les queda ya nada propio.
- ¿Como un psicoanálisis o algo así?
- Pero a la inversa. Tienen una fuerza enorme.
- ¿En qué está esa fuerza?
- Es que ahora están muy de moda todas las medidas de control mental. Y otro negocio que les ha salido redondo son los centros de tratamiento de los toxicómanos. A través de esto captan mucha gente. No sólo a los toxicómanos, sino también a sus familias. Y les sacan el dinero.
- ¿Hay más sectas que se dedican a los drogadictos para sacar el dinero?
- Sí, hay varias.
- ¿Parecida a la Cienciología son los gnósticos?
- No, porque la Cienciología tiene técnicas modernas. En cambio los gnósticos son muy antiguos.
- Me han dicho que los gnósticos están captando a Catedráticos de Universidad y a intelectuales, y esto es muy peligroso; porque si en una cátedra empiezan a sembrar sus ideas sectarias, pueden hacer mucho daño.
- En efecto. Van a buscar gente de alto nivel intelectual.
- Una cosa que me ha llamado la atención es Nueva Acrópolis. Tiene aspecto cultural. Hablan de los egipcios, de la India, etc. Y por lo visto es una secta.
- Y de las más destructivas y peligrosas. Precisamente porque tienen el mejor camuflaje de todas. Se presentan como amantes de la cultura egipcia, de la cultura clásica, de la romana, del arte, de la naturaleza, de la música, etc. Dan conferencias interesantes, atractivas, para atraer a la gente. Pero voy a decir una frase de su fundador argentino: «Nosotros dominaremos el mundo. Los que crean en nosotros serán nuestros esclavos. Los que no crean en nosotros serán eliminados». Es un movimiento neonazi fortísimo.
- Una de las sectas más espeluznantes son los Niños de Dios: que si roban niños, que si tienen prostitución infantil, etc. Lo que se sabe de los Niños de Dios es realmente espeluznante.
- Y todavía sería más espeluznante si se supiera la verdad. Porque se sabe poco. Los Niños de Dios es una de las pocas sectas que no está legalizada. Es ilegal en todos los sentidos. Por eso desparecen de un sitio y se van a otro. Y cambian continuamente de nombre. A los Niños de Dios en España se les ha conocido como: Niños de Dios, Familia del Amor, Familia de Misioneros Cristianos, y ahora, últimamente, se llaman Música Celeste. En algún pueblo los recibieron creyendo que eran un grupo musical.
Tienen un camuflaje perfecto. Son núcleos pequeñitos. Como una familia. No pasan de diez o doce viviendo juntos en un piso. Desde luego se dedican a la prostitución infantil. Mejor dicho, a la prostitución de menores. Preparan a los niños para las prácticas del sexo más sofisticado. Y lo hacen con vistas al chantaje.
- ¿Al chantaje de los padres de los niños?
- No, al chantaje de los hombres maduros, que son los que tienen dinero. Una niña monísima se acerca a un señor en un aeropuerto y le dice: «Dios te ama. Yo te amo. ¿Tú me amas?». Y le ofrecen una flor.
- Y estas niñas que van con la flor, ¿se supone que están contentas en los Niños de Dios?
- Todos los sectarios están felices en sus sectas. Les han comido el coco.
- Y estas niñas adolescentes, ¿no se dan cuenta que están dedicadas a la prostitución?
- No, porque para ellas la prostitución es el máximo cumplimiento del mandato.
- Vamos a hablar un poco de los Verdes Ecologistas y del Partido Humanista.
- Esto es lo curioso, porque no son dos partidos políticos. Eso es la tapadera legal de una secta. La secta se llama La Comunidad o Movimiento. De las dos maneras se les conoce. Su fundador también es argentino. Se presentan como un movimiento muy atractivo a la juventud. Se vuelcan hablando de ecología, de medio ambiente, de la vida naturista, etc. Todo esto a la gente joven le encanta. Y el Partido Humanista es lo mismo. Son dos ramas distintas de lo mismo.
- Bueno, pero si se presentan los dos a las elecciones no serán lo mismo.
- Es que lo que les importa es la propaganda que hacen a través de los espacios de televisión.
- Estamos llegando al final y no hay más remedio que dedicar unos minutos a las sectas satánicas. Porque hoy están proliferando mucho en España.
- Eso es también un tema de lo más curioso. Cuando empecé a investigar las sectas satánicas me pareció alucinante encontrarme con que hoy había en España brujas, magos y adivinos exactamente igual que en la Edad Media. Utilizando las mismas fórmulas y ritos. Y mucho más alucinante la cantidad de gente que va a pedirles, lo mismo que en la Edad Media, el elixir del amor o el maleficio de muerte para acabar con el rival económico, político o profesional.
En una sociedad tecnificada, como la nuestra, hay gente que recurre a las fórmulas mágicas para solucionar sus problemas. Es curioso. De las sectas satánicas puedo decir que es un mundo completamente distinto del de las sectas destructivas. Éstos son adoradores del diablo en todos sus nombres: Lucifer, Satán, Belcebú, etc. Aquí no hay dinero por medio. Es más sencillo. Son grupos muy pequeñitos.
En España tenemos otro grupo de los que yo diría que van por libre. Son personas del tipo de la bruja medieval, que conviven con la gente y son una mezcla de satanismo y cristianismo. Lo mismo echan un maleficio de muerte espeluznante que hacen tres veces la señal de la cruz sobre el aceite hirviendo.
El satanismo, como digo, me preocupa menos. Incluso me divertiría si no fuera porque detrás de todo rito satánico hay un rito de sangre. Siempre acaba con la muerte de un ser inocente. Y lo que me preocupa es cómo llega la gente al satanismo. A una persona normal y corriente no se le ocurre hacerse hija de Belcebú. Y, sin embargo, llegan a eso. Porque empiezan con cosas muy distintas.
Por ejemplo, hay gente que juega a la güija. Esto produce adicción y puede terminar en satanismo. Otro juego que tiene también relación con el satanismo es apretarse la yugular para producir falta de oxigenación con lo cual se ven visiones y alucinaciones. Esto, además de que puede producir la muerte, también lleva al satanismo. Éste es el método de iniciación de la secta satánica de San Francisco que es la más importante del mundo.
- Oye, queda poquísimo tiempo, pero quisiera unas palabras sobre algo que he oído que me parece brutal, inconcebible: que en las misas negras sacrifican a niños, que los matan, que los asesinan, que los rajan. Son cosas espeluznantes. Y por lo visto esto se hace hoy en España.
- Sí. A mí me han invitado dos veces a misas negras, pero no he querido asistir. No sé si iba a aguantar ni dos minutos.
- Pilar, muchísimas gracias, pero el tiempo no da para más. La entrevista ha resultado interesantísima, y espero que esclarecedora.
- A mí me gustaría que la gente no se asuste. Yo no quiero asustar a nadie. Lo que quiero es prevenir. Que nadie se deje engañar.
-Así es. Sabiendo nos podemos defender mejor. Pues muchísimas gracias.

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